Día tras día dedicaba tiempo para descifrar y poner en práctica sus palabras, pero lo hacía sumergida a todo aquello externo a mí, sin atender a lo que realmente necesitaba internamente.
Con el tiempo dejé mis trabajos estables como psicóloga. En esa época trabajaba en un programa de inserción laboral con personas con diagnóstico en salud mental. Era docente, en distintos institutos, de un programa de prevención de drogas con adolescentes. Además, lo compaginaba como tutora de trabajos de final de máster. Mi vida era un constante hacer y nunca me permitía parar y reflexionar. Poco a poco me iba dando cuenta de que no estaba capitaneando mi propia vida.
Las palabras de Miquel retumbaban en mi cabeza, cada vez más fuerte. Yo misma me boicoteaba, por el miedo a perder esa identidad que se había ido formando a lo largo de mi vida. Aplicar ese mensaje implicaba muchas cosas. Una de ellas, dejar paso a lo desconocido, que por supuesto mi ego saboteaba. Sin embargo, el destino trajo la muerte súbita de mi padre y en ese dolor recuerdo haber podido conectar con esas palabras y sentir una pérdida de control absoluto…pero a la vez se inició un despertar de aquella mujer que quería salir.
A partir de entonces, a parte del trabajo, sentí la necesidad de dejar atrás todo aquello que ya no tenía sentido para mí. No está siendo fácil, sigo en ese proceso.
Con el tiempo he puesto toda mi energía en conectar con ese deseo y en lo referente al ámbito laboral, la vida me dio la oportunidad de crear un programa de prevención a la exclusión con personas sin hogar. Gracias a Fem Camí logramos generar un plan de trabajo individualizado, mejorando así la calidad de vida de los participantes. Fue un gran aprendizaje.
Recientemente he cofundado y presidido una Cooperativa de Iniciativa Social en Barcelona durante dos años, donde he atendido y acompañado, a nivel individual y grupal, a personas de distintas edades a entender sus bloqueos, heridas y condicionamientos que los mantenían maniatados. A su vez, complementándolo con un trabajo emocional para poder dar una coherencia integral a los distintos procesos.
En estos momentos, empiezo un nuevo proyecto profesional: “La verdad que hay en ti” con el que pretendo acompañar a las personas a conectar con ellas mismas para que puedan hacer consciente que es realmente lo que les condiciona y que es exactamente lo que están buscando en su vida, para así poder alcanzar una verdadera libertad de ser y lograr una paz interior.
A menudo, sin darnos cuenta, vivimos basándonos en un conjunto de creencias que acaban formando la percepción que tenemos de nosotr@s mism@s, nuestra actitud, comportamiento y forma de relacionarnos con la realidad (como la interpretamos y vivimos). Todo ello acaba configurando una forma de vincularte contigo y el otro, que nace de esos condicionamientos que no permiten que emerja la verdadera esencia de quién eres realmente.