Desde hace mas de 10 años acompaño a personas en diferentes procesos vitales. Mi camino comenzó en 2023 cuando salí de la Universidad sin un rumbo fijo, pero solo con una intención, servir a lo humano, esta ha sido mi bandera desde que era joven, mi pregunta ¿Qué mas podría hacer por un mundo que se siente desigual y dañado?
Trabajé en muchos ámbitos, desde lo social, con adicciones, personas sin hogar, violencia de género, como en salud mental. Ha sido un camino de impacto donde he visto y vivenciado el desgarrador dolor humano, donde he aprendido y crecido a través de sostener, y por supuesto, de ser sostenida, pues la vida es para todos y el impacto de la misma también nos afecta a todos.
Como una de las formaciones que me impactó, sirvió y transformó, fue la realizada desde 2015 a 2017 en arteterapia por la Universidad Pablo de Olavide, con enfoque psicoterapeutico, aquí me vi realmente obligada a mirar dentro de mí y a comenzar un trabajo de transformación acompañada que dura hasta día de hoy. Siento que tras todos estos años ver nuestro interior, rescatarnos de los entresijos de la memoria, el trauma y la multitud de dolores internos que nos acompañan es uno de los actos mas supremos que podemos realizar por nosotros mismos.
En paralelo a la formación reglada, y junto a otras formaciones «más científicas» mi camino por seguir descubriendo formas y métodos para el acompañamiento humano, comenzando por mi misma, me llevaron a investigar otras posibilidades como serían Reiki, Registros Akháshicos, Sanación con el yo superior, PHE… Abriendo otra puerta de posibilidades a mi comprensión siempre insaciable.
En 2018 viví una experiencia que me marcó y volvió a transfomar mi propio camino. Tras un accidente, no muy aparatoso pero con resultados físicos desagradables, el dolor físico y la incapacidad de poder caminar más de 10 min seguidos comenzó a formar parte de mi vida. Ésta vivencia exigió que soltara cualquier deseo, proyecto o sueño, que me soltara a mi misma y me llevo a buscar la aceptación de forma profunda. Pensé que era el fin, pero a penas era un comienzo. Creo en los milagros desde entonces.
En 2021 tuve una experiencia donde fui sanada de ese dolor y esa experiencia, que podríamos denominar mas del campo místico que del psicológico, aunque para mi nada está separado, volvió a transformar mi entendimiento para siempre, es ahí donde aparece A.M.A, la puerta que se abrió ese día dio lugar a una nueva visión, donde el trabajo de trauma, el trabajo emocional y el espiritual pueden ser compatibles para aquellos que ya se sientan preparados.
Los procesos de la vida pueden ser realmente dolorosos, es por ello que conociendo de su dificultad mi camino está puesto al servicio de aquel que desee caminarse a si mismo, conocerse y tomar la fortaleza de su propia existencia.
Estoy aquí, estoy también para ti.
