Hola,
mi nombre es Alicia Manzano y soy Terapeuta y Coach Emocional, experta en resolución de conflictos y Facilitadora de CNV.
Desde que comencé a profundizar en la Comunicación No Violenta (CNV) , uno de los aspectos que más me ha impactado es el primer paso del proceso: aprender a observar sin evaluar . Puede parecer simple, pero en realidad es un desafío enorme.
Marshall Rosenberg, en su libro Comunicación No Violenta: Un lenguaje de vida , nos explica que una de las principales causas de los conflictos y malentendidos es nuestra tendencia a mezclar lo que realmente sucede (los hechos) con nuestras interpretaciones y juicios sobre ello .
Observar no es lo mismo que interpretar.-
Rosenberg ilustra esta idea con una frase poderosa:
«La CNV comienza por separar la observación de la evaluación. Cuando combinamos la observación con la evaluación, los demás tienden a escuchar crítica y reaccionan defendiendo su posición o atacando.»
Es decir, cuando describimos una situación, solemos agregar interpretaciones sin darnos cuenta.
Por ejemplo:
Observación objetiva: “Carlos ha mirado su teléfono tres veces mientras hablaba con él.”
Interpretación con juicio: “Carlos no me presta atención y es un maleducado.”
En el primer caso, simplemente estamos diciendo lo que ocurrió. En el segundo, estamos agregando una interpretación sobre la actitud de Carlos, lo que puede generar un conflicto innecesario.
Rosenberg pone otro ejemplo claro:
«Si un maestro dice: ‘Juan tiene baja autoestima’, en realidad está evaluando la actitud del niño. En cambio, si dice: ‘Juan rara vez levanta la mano en clase y cuando se le pregunta algo responde en voz muy baja’, entonces está describiendo lo que observa sin interpretar ni emitir juicios.»
El impacto de nuestras palabras en la comunicación.-
Si en lugar de decirle a nuestra pareja: «Nunca me escuchas» , decimos «En nuestra última conversación, hablé durante 5 minutos y no hiciste contacto visual ni responde a lo que dije» , estamos describiendo lo sucedido de manera más clara y menos acusatoria. Esto facilita la conexión y reduce la probabilidad de que la otra persona se sienta atacada.
Otro ejemplo práctico:
- Situación: En una reunión, una persona interrumpe mientras hablas.
- Observación: «Mientras hablaba, me interrumpieron antes de que terminara mi exposición.»
- Juicio: «A esa persona no le importa lo que digo y no respeta a los demás».
Cuando expresamos la situación con hechos concretos, facilitamos una conversación más empática y evitamos que la otra persona se ponga a la defensiva.
Cómo entrenar la observación objetiva.-
Marshall Rosenberg nos anima a practicar este cambio de lenguaje a través de ejercicios sencillos:
-
Ejercicio de diario: Cada día, elige una situación que te haya generado una emoción intensa. Escribe primero cómo la describirías de manera subjetiva y luego reescríbela eliminando juicios o interpretaciones.
-
Pregúntate a ti mism@:
- ¿Estoy describiendo lo que realmente ocurrió o estoy añadiendo una opinión?
- ¿Podría otra persona observar lo mismo y estar de acuerdo con mi descripción?
-
Usa el lenguaje de la observación en conversaciones diarias. Cuando hables con alguien sobre algo que ha pasado, intenta describirlo sin añadir opiniones.
Beneficios de aprender a observar sin juzgar.-
Cuando logramos separar la observación de la evaluación, mejoramos nuestra comunicación y reducimos los conflictos . Rosenberg explica que cuando usamos un lenguaje basado en hechos, la otra persona está más dispuesta a escucharnos y responder con empatía .
Además, esto nos ayuda a ver la realidad con más claridad y nos permite gestionar nuestras emociones de manera más consciente. Como dice Rosenberg:
«Las etiquetas, diagnósticos y juicios que colocamos a los demás son reflejo de nuestras propias necesidades insatisfechas.»
Por eso, si aprendemos a hablar desde la observación, también aprendemos a conectarnos mejor con lo que realmente necesitamos y con lo que quieren expresar los demás.
Aprender a observar sin interpretarnos permite comunicarnos de una forma más honesta y efectiva. Nos ayuda a comprender mejor a los demás ya expresarnos sin generar resistencia o conflicto .
Este es solo el primer paso en el camino de la Comunicación No Violenta (CNV), pero uno de los más importantes. Si te interesa profundizar más en este proceso y en cómo aplicarlo en tu vida diaria, te invito a que trabajemos junt@s.
Si sientes que a veces te resulta difícil expresar lo que realmente necesitas sin generar conflictos, o si quieres aprender herramientas para mejorar tu comunicación, puedo acompañarte en este camino . Junt@s podemos explorar cómo hacer de la CNV un hábito que transforme tus relaciones y tu bienestar emocional.
¡Estoy aquí para ayudarte! ¿Te animas a intentarlo?
Gracias por leerme.
Alicia Manzano
www.aliciamanzano.com